El lunes Bea tiene examen de Lenguaje. Los exámenes de Lenguaje de Bea son muy raros y me gusta espiarla cuando estudia.
- ¡Largo de aquí, pesada!
- ¿Estás estudiando Lenguaje?
- Lengua, sin je.
- Je, je.
- ¡Boba!
La maestra dice que en Secundaria el Lenguaje es sin je, y que por eso le quitan toda la gracia. Y por eso Bea tiene la cara de haber desayunado plástico.
Me siento en sillón al lado de la mesa de Bea y cojo un álbum para disimular. Bea subraya las palabras y las cambia de nombre: sintagma. Y entonces resulta que horriblemente feo y sumamente delicioso son lo mismo, igual, igual, igual.
- ¡No puede ser!
- ¡Alba!
- Eso está maaaal... Es imposible que sea lo mismo.
- No importa lo que significa, Alba.
- Pero es muy distinto y suena muy distinto.
- Es que sólo importa la estructura... Mmm... Cómo te lo explico. Es como si a nosotros nos arrancaran la carne y dejaran sólo el esqueleto.
Me quedo pensando un momento mientras observo a Bea cómo asesina palabras y las mete en ataúdes abiertos.
Así que cuando se va a por una chocolatina, cojo un boli, cierro los ataúdes y escribo al lado:
DEP
Que significa: Descanse en paz.
Y me voy a mi cuarto a hacer los deberes de Lenguaje, ahora que aún están vivas.
Me ha encantado. Alba, cuando pasen los años, ya verás la lata que te van a dar esos "muertos"
ResponderEliminar¡Entonces serán zombies!
ResponderEliminarEsto tiene pinta de estar basado en hechos reales.
ResponderEliminarSí, nos pasó a Bea y a mí. Sí, sí.
EliminarLa niña Alba también merece un premio, por ser sumamente deliciosa ;-)
ResponderEliminarhttp://disenocompartido.blogspot.com.es/2013/01/premios-liebster-blog.html